EN MI HAMBRE MANDO YO

 "¿pa encontrarme tu mundo? 

    Pa eso ya tengo el mío..." - Romance de Jose Etxailarena

 

No estoy reconstruyendo las ruinas pero empiezo a saber vivir en ellas.

Hay algo diferente en el dolor y quizá sea como entra la luz del sol entre las grietas y sonrío.

He silenciado el ruido de fuera.

Me escucho cuando quiero naufragar en el centro, entregándome a ese amor incondicional que le tengo a tus calles, Madrid.

Bailo enganchada a la cintura de amigos que no se movieron de mi lado en la Guerra; por eso, brindamos con cerveza fría en esta paz que por fin llega – para quedarse.

Me estoy llenando de todo lo que esta por venir y doy la cara ante la perspectiva de vivir, que empieza a gustarme más que suicidarme a cada rato libre.

Camino hacia la mujer que quiero ser, sin olvidar a la niña que grita de verso en cuando,

Pero,

Camino.

Marea y sus ojos negros.

Extremo y sus ojos verdes.

Y yo, que no he tenido que dejar de escuchar ninguno por miedo a recordar (les).

Y yo, que ya no me duelo ni me duelen.

Sostengo el peso de seguir con mis propias manos y escribo desde la reconciliación con soledad.

Desde que me quiero conmigo y me gusto más.

“La fidula, Clamores o Aleatorio”, cuando quiero, donde quiero y como quiero.

Libertad.

Estoy (re)conociéndome a través del deseo propio y no quiero ojos ajenos tras los que buscar aprobación.

He tenido que salir a rastras de todas las unidades de cuidados intensivos donde fallecí,

Y ahora,

Soy gata con vida, y siete después.