LA CULPA PESA UN KILO MÁS PARA EL QUE PARTE.

 

 

 

Se me rompió el anillo que compré cuando empezamos. Cuando todavía quedaba todo por vivir. SE ME HA ROTO UN JODIDO ANILLO DE PLATA POR LA MITAD hace tres días. El único anillo que he comprado en todo un año, aquella tarde antes de irnos a poner lavadoras y a tomar cerveza por nuestro barrio en Madrid. En nuestra segunda casa. No sé de qué más formas puede decirme la vida que esto se ha terminado. A ver si me entero. Y ya no sé si el anillo es una metáfora de nosotros o es una metáfora de mi costado que está asi. Roto por el centro. He cogido carrerilla en lo de llorar y ahora no sé dejar de hacerlo y estoy harta de llorar porque yo sé que merezco reír y estoy tan sumamente cansada de llorar por ti. Tanto.

Te odio. Te odio, Te odio. Te odio. Te odio. Te odio. Y es como la puta película, lo que más odio es no poder hacerlo porque te estoy odiando tanto porque en verdad te quiero muchísimo y estoy destrozada y posiblemente esté en la fase del enfado y yo solo quiero que las putas fases se acaben hasta que llegue la aceptación radical de toda esta mierda.  Hasta que cuando me acuerde de nosotros no me arda el pecho y me surjan dudas de si pude haberlo hecho mejor. De si tenía que haberte aprovechado más cuando te tenía. De si fui yo. Y luego me enfado aún más porque no.no.no. Porque yo no fui porque yo me desviví por ti y aunque hiciese cosas mal sé que te amé en carne viva con todo el corazón ahí en la mesa, peor aún, en tus manos sabiendo que si esto pasaba lo ibas a reventar y lo has reventado y odio odio odio odio esa puta mierda del "no eres tú soy yo" porque ES VERDAD. ERES TÚ. Porque yo te dejé 800 veces y todas eran mentira y tú solo me has dejado una y ha sido verdad. Te odio. Y odio no poder hacer más que amarte y me odio por vaciarme en lágrimas como lo estoy haciendo.

Odio este dolor. Odio todo esto. 

Ojalá la canción sea cierta y la "culpa pese un kilo más para el que parte".