ATTRAVERSIAMO.

Attraversiamo significa “Crucemos”.

Me quedo con eso de la película de hoy. Crucemos.

No sé si sabría explicar porqué. No lo ceo necesario.

Simplemente entiendo el gran abanico de posibilidades de esa palabra.

Entiendo porqué deberíamos utilizarla más.

Attraversiamo. Me quedo con ella. Y me prometo aplicarla.

Dentro de poco tengo que hacer alguna entrada con mi lista de palabras “mágicas”.

Ya sabéis, esas palabras de las que a veces hablo por aquí.

Esas palabras que me guardo en cuadernos porque me parecen especiales.

No las utilizamos mucho, pero deberíamos.

Palabras que son eso, especiales. Al menos para mi.

Ya os dije que alguna vez, con todas las palabras que voy guardando debería plantearme hacer un diccionario.

Un diccionario única y exclusivamente de palabras especiales.

A veces me imagino lo guay que sería poder compartir un lenguaje secreto con alguien.

Que solo esa persona y yo nos entendiésemos asi. Y al resto del mundo? Já, que le den… a veces sería maravilloso poder aislarte del resto sin tener que esconderte.

Igual que algunos afortunados hemos logrado aislarnos del resto solo con una mirada entre dos personas… molaría también con un lenguaje secreto…

Como mamihlapinatapai – esa sigue siendo de mis favoritas.

Prometo hacer pronto una entrada con la lista de palabras.

Me quedo con otra cosa de la peli de hoy,

Send me love and light every time you think of me.

And then, drop it.

Este fin de semana tengo un plan diferente y muy especial.

Siento estar usando tanto la palabra mágico y especial en esta entrada pero es que de verdad lo es.

Tan es así que voy a intentar pillarme una kodak desechable para este viaje.

Sabéis cuando tenéis la sensación de que aunque no sea un viaje de estos de mucha distancia, con playas paradisiacas o un gasto de dinero tremebundo, es precisamente mucho más increíble que todo eso porque se resume en un conjunto de muchas pequeñas cosas que lo hacen absolutamente único? Pues algo parecido es este viaje.

Un conjunto de pequeños detalles que lo hacen especial.

Ya os contaré…

Me voy a perderme un ratito por Tokio Blues…

Y luego a mimir.

Nos leemos,

L.